AVISO
Si estáis más o menos seguros de que vais a leer La casa al final de Needless Street no miréis ninguna reseña. Por el contrario, si antes de decidiros necesitáis un poco de guía sobre lo explícito que es, el terror en sí o cualquier otro tipo de aviso de contenido os recomiendo lo contrario. No os quedéis solo con una, buscad varias.
Dicho esto, vamos manos a la obra.
Lo primero que tenéis que saber es que hay una versión en inglés de la sinopsis que va mucho más al corazón de la novela, a sus virtudes y defectos, que la española. Pero la decisión de la editorial Alianza de poner esta es de hecho muy acertada. Algunas sutilezas entre el inglés y el español, en las que no voy a entrar por motivos obvios, ameritan el giro. Lo malo es que la versión que han aportado siento que no llama nada, no atrae.
Y, la verdad, no sé si estoy en posición de ofreceros una mucho mejor. Escribir una sinopsis o una reseña de este trabajo de Ward es todo un reto. Creo que, si miráis lo que se comenta, es lo que más vais a encontrar. Que no se puede decir mucho, que es complicado, que todo son spoilers.
La cosa es que este es un libro muy, muy tramposo. Se presenta a sí mismo como novela de misterio con toques de terror y, quizá, ciencia ficción. Una historia que te guía con pistas, en la que vas anticipándote a los giros, y siempre sientes que si volvieras a leerlo encontrarías todas las huellas de la resolución entre muchos guiños.
No es que sea mentira, pero a la vez tampoco es verdad. Mucha gente se enamoró del final, no es mi caso. No lo odio, pero me ha hecho sentir desapegada del resto del viaje. Que no cuajan las tres primeras partes con todo el último tramo por un tema de ritmo y, sobre todo, de que la autora parece intentar darte una lección.
Esto es una cosa que yo he llevado un poco regular, la verdad. No es que te suelte una moraleja o algo por el estilo, pero es evidente de manera exagerada a la vez. Tampoco es que no puedas imaginarte cuál es el misterio o que salga de la nada. Es que, para ser satisfactorio, depende de que te haya engañado y, siento, que de que disfrutes con un personaje que siempre me resultó desagradable. Y que este engaño pretende ponerte a ti, como lector, frente a un espejo metafórico. Uno del que parece querer que la humanidad salga un poco malparada.
A mí lo que se me hizo es un poco tonto. No por el tema que trata, que es muy serio y muy duro. Si no por la sensación de que buscase ser inteligente a través de generarte un rango específico de sentimientos sobre los que no puedo desarrollar.
No ha sido mi único problema en cualquier caso. Aunque en tramos bastante largos es una novela que engancha muchísimo, otras se me hizo un poco repetitiva y se me alargó demasiado.
Por contra, la atmósfera y la tensión están muy logradas. La sensación de estancamiento pero de que fuera pasa el tiempo, de un lugar encerrado en un momento preciso, es excelente. Y los personajes que sí que me han gustado (hay tres puntos y medio de vista) me han gustado muchísimo. Probablemente yo no soy el público objetivo de esta novela, pero eso no me impide reconocer que Catriona Ward es una escritora excelente.
Lo que busca hacer, porque todo está medido y planeado al milímetro, lo cumple con creces.
La novela en sí tiene dos tramas que se entrecruzan. Por un lado está Dee, una joven cuya hermana desapareció cuando era muy pequeña y que ha sido incapaz de pasar página. Por otro la casa que da nombre al título, donde entre misterios y saltos en el tiempo nos van a contar la historia del principal sospechoso de la desaparición y de su familia.
Ward llega a ponerte la piel de gallina. Es un terror psicológico a veces bastante sutil, que se muestra muchas veces solo en pequeñas cosas. Pero también es muy cruel y muy explícito contra animales y personas, incluidos niños. Es asfixiante la mayor parte del tiempo.
Tiene un poco de alivio dramático, pequeñas gotas de comedia que significan mucho. Y, sobre todo, busca equilibrar el peso de la violencia buscando tu empatía. Intentando encontrar una ternura en el lector que frene un poco el golpe. Hasta donde lo consiga, y cómo os marque o no, depende totalmente de cada uno.
Siento que toda la experiencia con esta novela va a depender de la manera en la que sintáis empatía. No digo si mucha o poca. Me refiero a la manera en la que este sentimiento opere en vosotros. A si necesitáis que un personaje os caiga bien para que os la genere, a si sois sensibles de una manera u otra a torturas, crímenes, autolesiones y la manera en la que se expresan. A la atención que le ponéis a unas escenas u otras dependiendo de a qué sois más sensibles, porque muchas cosas quedan sugeridas y no llegas a saber qué a pasado o no.
Y todos sabemos que a veces la imaginación es peor que lo que podría llegar a poner.

- Título original: The Last House on Needless Street
- Autora: Catriona Ward
- Traductora: Cristina Macía
- Publicación original: 2021
- Editorial: Alianza (sello Runas)
- Páginas: 328
- ISBN: 978-84-1362-450-1
- Precio: 22€
- Género: Misterio, Terror psicológico
- Autoconclusivo

Deja un comentario